Muy pocos grupos (por no decir,
uno) han sido capaces de tener una carrera impecable, en la cual todos los discos sean dignos de escuchar, hayan supuesto una novedad o conserven la fuerza y el bien hacer de los primeros. Es un hecho muy normal que, al hablar de carreras "largas" (en mi opinión de 5 discos en adelante) a partir del cuarto, el tercero o incluso el segundo, el grupo empiecea hacer cosas que nada tienen que ver con lo que hacía en un comienzo o que no alcanzan la calidad de sus anteriores trabajos.
Hay muchos casos claros de este fenómeno, pero voy a centrarme en dos que, para mí, son de lo más representativo: The Clash y Pixies.
The Clash comenzaron su carrera junto a muchos otros grupos de la oleada punk de finales de los 70 (Sex Pistols, Damned...) con un primer álbum titulado The Clash, de punk británico puro y duro, del que destaca su primer gran éxito:
White Riot . Después de este debut lanzaron "Give'em Enough Rope", un segundo disco con el que The Clash perdieron parte de su fuerza y su frescura (en parte debido a a producción del mismo, mucho más a la americana). Aún así, podemos encontrar perlas como
Safe Uropean Home o
Stay Free .

Pero, sin duda, su mejor álbum fue "London Calling". Lanzado en diciembre de 1979 es conciserado como la obra maestra de The Clash, así como uno de los mejores discos de la historia del rock. La combinación de punk, rock clásico, ska... dan como resultado un disco que, sin duda alguna, no deja indiferente. En el encontramos joyas como
Rudie Can't Fail, I'm Not Down,
Jimmy Jazz,
Wrong'em Boyo,
Death Or Glory, Koka Kola,
The Card Cheat... y un larguísimo etc (yo diría que los 19 cortes son reseñables).
1 comentario:
Muy buena la entrada !
saludoss!
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